16 de junio de 2007

A pocas palabras
quitan sentido oidos sordos
a un segundo
la eternidad es por siempre
mas la sordedad no es bendicion de los ciegos
y la eterna simplicidad
más un segundo no durará
todo bueno , es para los ciegos
mas ese segundo
ver no dificulta
pero a la vista,
mejor ser ciego.
En un segundo
el rio muestra sus peces
al siguiente
ir tras el viento
correr es por las aguas
correr sin tropezar
para un ciego es imposible
mas las pocas palabras
escribieron un libro
que sumieron al ciego
en eterna,
completa soledad.



En este momento poco me importa ser ciego.
Esta es la primera cosa que escribo y publico.
En realidad en este momento me da lo mismo todo ....

3 comentarios:

just the way the cookie crumbles dijo...

esta medio confuso :S

just the way the cookie crumbles dijo...

pero se enteinde si se lee con precision

Anónimo dijo...

entiendo tu soledad
al final somos todos ciegos
pero no todos sienten como sentimos nosotros
es preciso tener ayuda
un lasarillo o algo asi
pero si a tu alrrededor no encuentras eso
es hora de buscar
para poder disfrutar de todas las cosas
sin tener limitaciones ni tristesas
busquelo
sera lo mejor
:DD

El gato en la ventana

Uno de los gatos que vivió conmigo por algunos días se tiró por una ventana. Tuve que bajar a buscarlo y llevarlo de nuevo a la casa. Y unos días después me di cuenta de lo que pasaba. El gato, estaba parado en la misma ventana desde la que se tiró el otro día y miraba fijamente al organillero que se ponia cada tarde con su loro a tocar sus melodias a los mecanizados caminantes que por esos sectores circulaban en el día y, de vez en cuando, o sea cuando sentía que era el momento, hacia un movimiento como para lanzarse a disfrutar de la calle, que junto con la musica y los pequeños que se acercaban siempre terminaba convertido en una especie de remolino de jubilo y fascinasión.
Sé lo del organiero porque cuando se asomaba por otras ventanas desde las que no se veía se retiraba al instante. Ojalá no se quede esta vez , como pasa a veces con muchos, sólo mirando para siempre.