5 de octubre de 2007

Cable a tierra

La plenitud corrió por mis venas en la oscuridad de mi habitación , sobre aquella cama donde descansaban dos individuos retorcidos, perplejos, entumecidos. Logre alcanzar la almohada que anhelaba desde que entre en ella, mi cabeza miraba al techo, como todas las noches, pero este día no pensaba en que haría al abrir los ojos al salir del sol el día siguiente. Pensaba en si sería posible tomar un momento y inmortalizarlo para siempre. En nuestra mente, rescatarlo y hacerlo nuestro. Mis dedos comenzaron a acariciar los cabellos de mi libertad, de mi paz interminable, era mi unica explicación para estar asi, torcido, entregandome a la fortuna. Recorrí suavemente cada uno de sus detalles, jamas la había visto cerrar sus ojos para desconectarse del mundo, para dormir de la existencia, jamas me habia visto adorar un sueño tan pasivo, enroscada escapando al frio de la noche. Y yo miraba el techo, una manta cubria nuestra soledad quieta, al igual que nosotros. Pensaba en los conocimientos que recibía momentos antes , que ganas de seguir viviendo esos pensamientos y armarlos y rearmarlos como si fueran rompecabezas con mil formas posibles, mil posibilidades. El sol asalto mi reflexion, el vil salía tras los cerros y me obligaba a terminar con mi ilusión. Trate de despertarte, mas tu respondiste a mi inquietud y te acercaste bajo nuestra cubierta, respirando, palpitando. Te uniste a mi pensamiento, complementaste la vida que yo deseaba con tanto ahinco hace algunos tiempo. Tomaste mi cuello y te aferraste, ahora nada te dejaría, nada podria, tenia razón, un momento si se puede dejar por siempre en nuestra mente, nos juntamos y sin palabras apelamos a nuestra confianza. Y el dia me robo mi ilusion. Se marcho caminando a otro lecho en las lejanias. Pero yo aún recuerdo ese momento. Que dia era? aa si , creo que era viernes ...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Que lindo, es todo tan delicado en un modo especial, como con aroma a amanecer :)

Anónimo dijo...

:):):)tender

Anónimo dijo...

lindo
j0

simiadinsaniam dijo...

Hola..!

Jajjaa me encantó la pequeña historia del gato en la ventana. Una recuerdo retorcido de mi perro hace poco muerto vino a mi mente cuando ví la foto. Jaja medio retorcido pero en fin. Nada pos buenos escritos tienes y espero que sigas haciendo más.

Suerte

Mayra =)

El gato en la ventana

Uno de los gatos que vivió conmigo por algunos días se tiró por una ventana. Tuve que bajar a buscarlo y llevarlo de nuevo a la casa. Y unos días después me di cuenta de lo que pasaba. El gato, estaba parado en la misma ventana desde la que se tiró el otro día y miraba fijamente al organillero que se ponia cada tarde con su loro a tocar sus melodias a los mecanizados caminantes que por esos sectores circulaban en el día y, de vez en cuando, o sea cuando sentía que era el momento, hacia un movimiento como para lanzarse a disfrutar de la calle, que junto con la musica y los pequeños que se acercaban siempre terminaba convertido en una especie de remolino de jubilo y fascinasión.
Sé lo del organiero porque cuando se asomaba por otras ventanas desde las que no se veía se retiraba al instante. Ojalá no se quede esta vez , como pasa a veces con muchos, sólo mirando para siempre.