20 de septiembre de 2007

Compenzando ...

Los siglos fueron pocos
desde luego que eso es poco
las manos cargan la conciencia de lo humildes
los pies la de los ricos
no se puede esperar mas
de un siglo entre sabanas,
lamentos, llantos
La vida no es llorar
tampoco es practicar
la vida es seguir con lo propuesto a ella misma
y apostar.
Apostar por tu cabeza
que lo que dira tu boca
sera lo mismo
que tus manos seguiran

2 comentarios:

Anónimo dijo...

mmmm
y estas feliz de vivir... asi como me dijiste ayer...
y yo bailo con mi jugo ps
sipo
encuentrame en quilpue;)
porq como ya sabes
somos dos en la ciudad
de quilpue o de tu ya sabes

Anónimo dijo...

Apostar...
me quedó dando vueltas

El gato en la ventana

Uno de los gatos que vivió conmigo por algunos días se tiró por una ventana. Tuve que bajar a buscarlo y llevarlo de nuevo a la casa. Y unos días después me di cuenta de lo que pasaba. El gato, estaba parado en la misma ventana desde la que se tiró el otro día y miraba fijamente al organillero que se ponia cada tarde con su loro a tocar sus melodias a los mecanizados caminantes que por esos sectores circulaban en el día y, de vez en cuando, o sea cuando sentía que era el momento, hacia un movimiento como para lanzarse a disfrutar de la calle, que junto con la musica y los pequeños que se acercaban siempre terminaba convertido en una especie de remolino de jubilo y fascinasión.
Sé lo del organiero porque cuando se asomaba por otras ventanas desde las que no se veía se retiraba al instante. Ojalá no se quede esta vez , como pasa a veces con muchos, sólo mirando para siempre.